Una persona ha muerto y al menos otras nueve han resultado heridas en un accidente en una montaña rusa de un parque de atracciones sueco.
Según testigos, la atracción del parque Gröna Lund de Estocolmo podría haber descarrilado parcialmente. La montaña rusa Jetline tiene un techo de 30 m de altura y se desplaza a 90 km/h.
Tras el incidente, el parque fue cerrado mientras la policía y otros efectivos de emergencia acudían al lugar.
Jan Eriksson, director ejecutivo del parque, declaró un "día de luto".
Tres de los nueve heridos sufren al parecer lesiones graves y están siendo atendidos en un hospital cercano.
El percance se produjo poco después de las 11:30 hora local sueca (9:30 GMT).
Cuando la parte delantera de la montaña rusa se desprendió del vehículo y se detuvo en medio de la pista, hizo caer al suelo a los 14 pasajeros.
La periodista Jenny Lagerstedt, que se encontraba en el parque con su familia, declaró a la cadena sueca SVT que estaba cerca cuando oyó un ruido metálico y notó que la pista temblaba.
Añadió que sus hijos estaban aterrorizados y dijo: "Mi marido vio un vagón de montaña rusa con gente dentro cayendo al suelo".
Algo similar no debería haber ocurrido en Gröna Lund, pero ocurrió, según el Sr. Eriksson.
El parque, de 140 años de antigüedad, cerrará durante una semana para que la policía pueda llevar a cabo una investigación, añadió. El dinero gastado en entradas para ese periodo de tiempo se devolverá a quienes ya las compraron.
